Entre más cerca, más lejos

 

Autor

Sandra Mercedes Parra Trujillo

Estudiante: Diplomado en Ambientes Virtuales de Aprendizaje
Fundación Universitaria Católica del Norte
sandymechas@hotmail.com

... El tiempo. El trabajo. El mundo de hoy,
nos alejan cada vez más de nuestros hijos;
¿qué estamos haciendo para evitarlo?

Relato

Lorena ya no era la misma, no respondía igual con sus estudios de secundaria, estaba perdiendo el apetito y ni siquiera se interesaba por su postre preferido o por su telenovela favorita; inclusive no volvió al gimnasio donde siempre se encontraba con sus amigas y compartían temas de juventud. Abandonó a su mascota, ya no la alimentaba o le daba su baño quincenal, ni siquiera la sacaba a pasear en la mañana.

A sus 16 años Lorena sentía que la vida no valía la pena, día tras día perdía el interés total por los aspectos joviales que caracterizan a las chicas de su edad.

Los padres de Lorena empezaron a notar que algo ocurría, intentaban hablar con ella, y lo único que conseguían era un mar de lágrimas, pero ninguna explicación concreta al respecto. En el afán por encontrar soluciones la llevaron con el psicólogo....

—“la niña está entrando en la etapa normal de los adolescentes, presentará síntomas de desinterés, inconformismo, mal genio, pero todo esto se soluciona manteniéndola ocupada” —, solía decirles el especialista.

Fue entonces cuando sus padres iniciaron una carrera contra el destino. Queriendo darle solución a este problema, decidieron que entrara a estudiar baile en la academia más prestigiosa de la ciudad; su maestra de danza contemporánea le decía...

— “Bravo, bravo, eres una gaviota por los aires volando entre las nubes, serás la atracción de nuestro espectáculo” — y efectivamente durante seis meses de arduo trabajo Lorena se convirtió en una bailarina ejemplar. Pero, tan sólo había presentado dos funciones cuando decidió abandonar el escenario.

Intentaron muchas cosas para animar a su hija, pero nada funcionaba. Nuevamente sus padres desesperados volvieron al psicólogo en busca de respuestas...

—“No se preocupen, es normal en su edad”—. Pero ellos, deseosos de ayudarla, un buen día en el centro comercial de tecnología se interesaron por un computador...

— “claro, esta es la solución, nuestra muñeca podrá distraerse y descubrir el mundo” —, decían; y efectivamente compraron la mejor máquina que encontraron y se afiliaron a un canal satelital para facilitar y tener la mejor conexión.

Lorena acepto el obsequio desinteresadamente, pero con el paso de los días se fue interesando en su funcionamiento, hasta el punto que permanecía frente al computador día y noche

Sus padres pensaban que habían encontrado la solución perfecta porque veían a su hija motivada e ilusionada nuevamente con una actividad y que el computador había resultado muy práctico, porque nada mejor que tener a su pequeña todo el tiempo en casa sin que ningún peligro la aceche, pero...

La verdad era otra, Lorena sin contar con una asesoría apropiada sobre el manejo de internet se había dejado arrastrar por información poco favorable para su etapa.

Lorena había entrado en una página de rituales satánicos donde se había iniciado como súbdita de este grupo, el cuál le había hecho creer que para descubrir la razón de su existencia debía terminar con su vida...

Lorena preparó el evento final, decoró su habitación con una cortina negra, consiguió tendidos negros para su cama, cambio los tapetes rosados por negros, inclusive guardo sus muñecos de peluche en bolsas negras, su ropa para esa noche era un vestido largo negro, su maquillaje tanto en las uñas como en su rostro era negro, coloco filas de veladoras negras. Todo estaba listo, sus padres trabajarían hasta tarde y no llegarían temprano a casa.

Faltaban diez minutos para las doce de la noche y Lorena leía en su computador las indicaciones finales...

Se dirigió a su cama y tomando ese puñal plateado que estaba sobre la almohada se postro en el suelo... Lentamente lo llevo a su corazón, y...

Su esposo tocó a la puerta para despertarla del sueño en el que estaba sumergida.

Lorena en realidad es una asesora virtual para adolescentes que dedica su tiempo a rescatar a la juventud de la red negra, vive felizmente con su familia y disfruta enseñándoles a sus hijos el uso apropiado de internet.

Y tú... ¿Qué tipo de persona eres? ¿Serás como los padres de Lorena o la misma Lorena en su sueño?

O quizás ya entraste en la moda de la virtualidad para estar más cerca de tus hijos, sino es así, hazlo, quizás mañana sea tarde.